La Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas (CONADEP) fue creada por Raúl Alfonsín el 15 de diciembre de 1983 con la misión de investigar lo sucedido durante la dictadura. Estuvo integrada por personalidades culturales, científicas, religiosas y periodísticas, por defensores de los derechos humanos y legisladores y presidida por el escritor Ernesto Sabato.

Las organizaciones de derechos humanos aportaron toda la información que habían reunido y la CONADEP recorrió el país recopilando testimonios y visitando los lugares donde había operado la represión. Así recabó denuncias de víctimas y sus familiares sobre secuestros y desapariciones, recopiló testimonios del personal de las Fuerzas Armadas y de seguridad y localizó cientos de lugares que funcionaron como centros clandestinos de detención. En septiembre de 1984, la CONADEP presentó el informe Nunca Más, que documentó el funcionamiento de la represión y sus principales blancos y características; más de ocho mil desapariciones; la existencia de los centros clandestinos de detención; las torturas a secuestradas y secuestrados; la apropiación de niños y niñas y el robo de bienes. El Nunca Más sería una de las bases para los juicios por los crímenes de lesa humanidad.